EL ESTILO K

Mauricio B. Bianchi

El periodismo tiende a "simplificar" y "rotular" imponiendo modas que, muchas veces, no son un reflejo adecuado de la realidad. El Presidente de la Nación ha sido "víctima" de este hábito y se ha instalado en el lenguaje cotidiano el escuchar hablar de "el estilo K".

Ahora bien, ¿qué se supone que significa?. Eso es lo que nadie termina de definir.

Se supone que es como decir que Néstor Kirchner tiene un "estilo propio". Pues... ¡vaya novedad!... resultaría muy extraño que una persona que llega al máximo cargo del Poder Ejecutivo Nacional no tenga un "estilo propio"... ¿o a alguno le quedan dudas que Alfonsín, Menem, De la Rúa y hasta Duhalde (que no accedió a la presidencia por elecciones) han tenido su "estilo propio"?.

Descartado esto podemos suponer que se refieren a que es "transgresor" pero... y en eso ¿qué hay de distinto?. ¿Acaso tuvimos un Presidente más transgresor que Menem?.

Podemos suponer que cuando se refieren en los medios al "estilo K" están hablando de algunas de estas características del Presidente:

-que es muy personal y cerrado

-que busca demasiadas confrontaciones

-que no respeta el protocolo

-que habla claramente al pueblo

-que es muy zurdo

Y así podemos mencionar varias de las cosas que se van comentando del Presidente y que varían según el canal, la radio o el diario que lo refleje.

Lo que me preocupa de todo esto es que nos agotemos en estas cuestiones sin analizar "el contenido".

No me importa que me hablen de "el estilo K", quiero que me hablen claramente de las cosas.

Si se refieren a "romper el protocolo"... eso francamente es lo que menos me importa.

Si se refieren a "que es muy zurdo"... comencemos por definir a que se refieren con eso y entremos en un análisis ideológico. Los debates en serio me parecen un ejercicio fantástico del intelecto.

Si se refieren a que es "muy cerrado y personal"... me preocupa en la medida que eso influya en sus decisiones de gobierno, en la definición de las políticas a seguir. Si sus decisiones terminan siendo las suyas y las de sus personas de confianza, no tengo inconvenientes... todos podemos equivocarnos. Si el ser cerrado es "cerrarse a los lobbys y acercamientos interesados" me parece fantástico... ojalá las decisiones sean teniendo en cuenta el interés general y no el de ciertos sectores (que generalmente han sido a lo largo de los años los mismos).

Si se refieren a que "busca demasiadas confrontaciones"... debo decir que es posible, tal vez no sea bueno. Lo que me preocupa de esto no es el "abrir muchos frentes" sino que tenga evaluadas correctamente las fuerzas con las que cuenta y sepa ser un buen administrador de ellas. No sería bueno para el país otro final "a lo De la Rúa" y creo que, lamentablemente, en ese sentido su mayor amenaza la tiene en el totalmente "desconfiable" aparato duhaldista de la Provincia de Buenos Aires.

Si se refieren a que "le habla claramente al pueblo"... debo decir que, seguramente, en varios temas (por ejemplo el de las tarifas)... debo ser medio sordo. El Presidente promete que no habrá aumentos... ojalá fuera así pero no me suena ni siquiera posible. No tendré problemas en reconocer mi error... o el acierto de Daniel Scioli. En unas semanas vemos.

Ojalá que con el paso del tiempo recordemos con una sonrisa "el estilo K" y no como hoy recordamos: "el palabrerío de A" o "la fiesta de M" o "la inacción de D".

Dr. Mauricio Bernardo Bianchi

mauriciobianchi@eldistrito.com.ar